“Somos testigos hoy de la inauguración del monumento a la heroína y luchadora Juana Azurduy. Con el emplazamiento de esta monumental obra donada por el Gobierno del Estado Plurinacional de Bolivia estamos reivindicando la unión de los pueblos de Nuestra América y, fundamentalmente, repudiando el genocidio de nuestros pueblos originarios”, sostuvo hoy Juan Carlos Junio, diputado nacional del Partido Solidario.
“La líder de la guerrilla patriota, nombrada teniente coronel por Manuel Belgrano, con su heroica determinación jugó un papel trascendente en la guerra de la independencia junto a los otros líderes de la republiqueta altoperuana. Asociada a la estrategia de Martín Miguel de Güemes, la lucha en el territorio norteño frenó durante años la ofensiva realista posibilitando que San Martín pudiera desplegar su estrategia principal yendo por el Pacífico a Chile y a Perú”, afirmó el legislador, quien es también profesor de historia.
Para Junio, «hay un enorme simbolismo» en el traslado del monumento de Cristóbal Colón anteriormente emplazado detrás de la Casa Rosada, para darle lugar a la estatua de Azurduy. “En la Argentina, poner en el lugar de un emblema de la venida del colonialismo la estatua de la líder de las milicias conformadas por criollos e indios, símbolo de la resistencia de los pueblos originarios masacrados en uno de los más grandes genocidios de la historia de la Humanidad, tiene mucho que ver con los tiempos que corren en nuestro continente”, aseguró.
Asimismo, Junio mencionó que hay un debate pendiente en torno a otros monumentos. “En nuestro país, los monumentos son el resultado del triunfo político y, en consecuencia, cultural de un sector y una clase social; por eso Bartolomé Mitre y Julio Argentino Roca están en muchas de nuestras plazas. Es un tema que tiene que ser debatido en la sociedad argentina para darles su lugar a los hombres y mujeres que defendieron auténticamente la independencia nacional en términos económicos, políticos y culturales”, concluyó el diputado.