«Nosotros creemos que no hay default porque se ha pagado. Pero lo que es interesante es pensar qué es un verdadero default, para comprender claramente su significado y contrastar que aquí no hay ninguno. Y el ejemplo más claro, más contundente, es el default argentino de 2001», sostuvo Juan Carlos Junio, diputado nacional del Frente Nuevo Encuentro.
«En el 2001 este país entró en quiebra. Argentina no tenía caja para pagar los sueldos a los trabajadores, los empleados públicos, los médicos. El país colocaba a su sociedad en los máximos índices de desocupación y pobreza. Los bancos cerraban y no se devolvían los depósitos. Eso es un default. En primer lugar, un default social hacia el propio pueblo y, simultáneamente, la quiebra y la imposibilidad de pago a los acreedores extranjeros. Así que quien quiera saber claramente qué es una verdadero default, sólo tiene que ver las imágenes del default argentino de 2001», detalló el legislador en declaraciones radiales.
En diálogo con Radio Del Plata, Junio enfatizó que la derecha local quiso instalar que el 31 de julio sería «un día fatídico en el que vendrían todas las plagas bíblicas». «Por el contrario, todo indica que no tenemos ninguna catástrofe, demostrando que hay una vida posible sin someterse a los poderes financieros mundiales», expresó el referente del movimiento cooperativo.
«La derecha criolla básicamente va a continuar con la misma estrategia: machacar con la idea del desastre, el miedo, el caos. Incluso el ´special master´, otro atildado señor que se sacó la máscara y dejó claro que es un buitre más, nos advirtió que ´viene el caos´», señaló Junio.
El diputado, miembro del grupo fundante del Consejo Económico y Social por la Argentina, sostuvo además que «los países que se ven atacados por los fondos buitre pueden transitar caminos autónomos, distintos de los que estos usureros internacionales exigen recorrer».
«Creo, que una vez más los sorprendimos -agregó-. Ellos estaban convencidos de que este gobierno y este pueblo iban a someterse, subordinarse, allanarse a los mandatos de los poderes financieros mundiales. Eso no ha ocurrido porque aquí hay otra determinación política». «Queda entonces afirmarnos con lo nuestro, ir por más, seguir más que nunca mirando al Sur y continuar profundizando el rumbo, con más distribución de la riqueza a favor de nuestro pueblo», finalizó el legislador.